El pasado domingo celebramos el cumpleaños de mi sobrina Irene. A los niños les preparé una delliciosa tarta de chocolate que ni cataron, tan entusiasmadas estaban jugando que pasaron de ella, pero dieron buena cuenta los adultos, quedarse, no se quedó en el plato.
A los mayores les preparé la tarta de ponche de huevo que os presento hoy. Quería hacer una tarta distinta y lo conseguí. Si buscais una tarta ligera para después de una comida copiosa, esta es vuestra tarta. Y bueno, para las próximas navidades, ni os cuento 😉
Con ella quiero participar en el concurso que celebra Apicius junto con los siguientes patrocinadores:
Marvi, rotulos y placas conmemorativas
Elementos del invento:
base:
– 220 gr de galletas tipo digestive
– 85 gr de mantequilla derretida
– 1 cucharada de azúcar
– 1 cucharada de harina
relleno:
– 1 sobre de gelatina neutra en polvo
– 5 cucharadas de agua fría
– 5 huevos grandes (separadas las yemas de las claras)
– 145 gr de azúcar + 2 cucharadas
– 1 pizca de sal
– 445 gr de leche entera caliente
– 3 cucharadas de ron añejo
crema:
– 250 gr de nata 35.1% M.G.
– 2 cucharadas de ron añejo
– 1 cucharada de azúcar glass
– nuez moscada
Elaboración de los elementos:
base:
Trituramos las galletas y le añadimos la mantequilla derretida, el azúcar y la harina, así como un chorrito de leche para casar la masa. Con ayuda de unos guantes de latex distribuimos sobre el molde, procurando que también cubra parcialmente las paredes. Horneamos a 175º durante 15 minutos.
relleno:
Espolvoreamos la gelatina en un vaso con el agua fría indicada. Reservamos.
Batimos las yemas junto con el azúcar, la sal y la leche caliente hasta que comience a espesar. Retiramos del fuego. Añadimos el ron y la gelatina y removemos hasta que se haya disuelto. Refrigeramos durante 30 minutos.
Batimos las claras hasta que estén espumosas, momento en el que le añadiremos las dos cucharadas de azúcar que hemos reservado, terminamos de montar.
Mezclamos con la masa reservada de las yemas, con movimiento envolventes. Vertemos sobre la base y refrigeramos. Mejor de un día para otro.
Crema:
Semimontamos la nata, le añadimos una cucharada de azúcar glass. Terminamos de montar. Añadimos el ron y volvemos a darle con las barillas para que se integre bien.
En el momento de servir la tarta, cortar la porción, colocar una cucharada de la crema y espolvorear con nuez moscada.
Ale, a disfrutar!!!